Cerca de un nuevo mercado de pases, Boca ya empezó a moverse para concretar varias operaciones en estas semanas. Lo primero y principal es cerrar las renovaciones de contratos de algunos miembros del plantel, como Carlos Tévez, Mauro Zárate y Franco Soldano. Además, Riquelme está luchando mucho por la incorporación de Mauricio Isla. Siendo así, el máximo ídolo tiene muchas esperanzas puestas en otro jugador.
Hay varios jugadores que deben volver se sus préstamos y uno de ellos justamente es otro enganche. Gonzalo Maroni regresará a la Argentina luego de un año en el fútbol italiano. Con 21 años es una de las grandes promesas del fútbol argentino y es citado usualmente por Fernando Batista a la Selección Sub-23, de cara lo que serán los próximos Juegos Olímpicos. Román espera por su llegada para potenciarlo y que sea importante en el Xeneize.
Se colocó una opción de compra de 15 millones de dólares por él, algo que el conjunto de la Serie A no ejecutará. Es por eso que el cordobés regresará para ponerse a las órdenes de Miguel Ángel Russo. Riquelme sabe de sus condiciones técnicas y con sólo 21 años tiene una enorme proyección a futuro. La idea es potenciarlo para que le de varias alegrías a los hinchas Xeneizes. De hecho, ya lo piensa en dos posiciones en el campo de juego.
Si bien puede tirarse por las bandas, la idea de JR10 es que se mueva por el centro del campo. Es por eso lo imagina como un acompañante del volante central, algo que ya viene haciendo Pol Fernández en el último tiempo. La vuelta de Maroni supone un gran refuerzo a costo cero, teniendo en cuenta que la situación económica no está dada para realizar grandes inversiones. Ahora dependerá de Russo en darle al volante más minutos, algo que no hicieron Schelotto y mucho menos Alfaro.
