Marcelo Aravena, histórico barrabrava de Boca Juniors, que hace dos meses salió de la cárcel, estuvo cerca de la muerte, pero un milagro lo salvó. Este fue a abrir la puerta de su casa en Lomas de Zamora, después de que tocaran el timbre, pero al salir se encontró con una persona que le gatilló tres veces: se salvó porque los disparos no salieron.
Los testigos de la zona contaron que vieron a una persona bajar de una moto con barbijo blanco y huir luego de los disparos fallidos. El suceso ocurrió este martes, minutos antes del mediodía. Aravena, alias el Manco o Marcelo de Lomas, tiene un largo prontuario. Estuvo preso 12 años por los asesinatos de Ángel Delgado y Walter Vallejos, los dos hinchas de River que fueron interceptados a la salida de un superclásico jugado en La Bombonera en 1994.
También estuvo implicado en una batalla que se dio en el Bajo Flores, la que se realizó por el poder de La 12 en el 2013, en la que murieron dos hinchas del Xeneize. Y, desde el 2017, se encontraba detenido en el penal de Lomas como parte de la causa de la feria La Salada, por extorsión, robo y venta de drogas.
Ahora, Aravena gozaba de la libertad monitoreada desde hacía dos meses, tras estar detenido en prisión preventiva y salir por haberse cumplido el tiempo máximo para estar detenido en esa condición. En la barra de Boca, es histórico líder de la facción de Lomas, la más peligrosa de todas y que en febrero tuvo un enfrentamiento interno en Córdoba, donde el cuadro de La Ribera jugaba contra Talleres.
